martes, 3 de mayo de 2011

El remedio homeopático de la semana (XII): Osama bin Laden

Era inevitable que, entre los muchos chistes que circulan sobre la muerte de Osama bin Laden, surgiera alguno relacionando su "entierro" en el mar con la homeopatía. Esta es la última versión que he leído:


Tiene su lógica. Si, supuestamente, la homeopatía cura lo similar disolviendo lo similar hasta extremos inverosímiles, la disolución del cadáver de bin Laden en el agua del océano deberá convertirla en un poderoso remedio contra el terrorismo y la intolerancia religiosa, ¿no?

Pues quizá no. Vamos a hacer unos cuantos números (facilitos, no se asusten).

Según EE.UU., el cadáver fue arrojado al Océano Índico. Océano que, según Wikipedia, contiene nada menos que 73.556.000 Km3 de agua. Como en la homeopatía, a pesar de todo ese rollo que cuentan a veces sobre estructuras nanomoleculares o efectos cuánticos, lo de la precisión es opcional, podemos redondearlo a 75.000.000 Km3, que son algo así como 75.000.000.000.000.000.000 (o 75x1018) litros. Que pesan otros tantos kilos.

No sé cuánto pesaba bin Laden, pero teniendo en cuenta que era bajito y escuchimizado, parece razonable pensar que no llegaría a los 75 kilos. De modo que, si hacemos la correspondiente división, tenemos que un bin Laden disuelto en el Océano Índico daría una "potencia" (en el sentido homeopático del término) de 18D o 9CH, como prefieran.

¿Sería suficiente? Probablemente no. Citando de aquí,

como regla general, las enfermedades crónicas (es decir, aquellas que hemos tenido durante mucho tiempo) deben ser tratados con un elevado número, es decir 30C – 200C y las agudas (es decir, aquellas que son relativamente nuevas), con números bajos, es decir, 6C.

De modo que el bin Laden 9CH serviría como mucho para, ejem, "curar" a los terroristas ocasionales, pero no a los crónicos. Para estos hace falta mucha más potencia.

Claro que el Océano Índico no está aislado del resto de los mares del mundo, y las corrientes oceánicas se encargarían de repartir la mezcla por todo el planeta, ¿verdad? Vamos a ver a dónde nos llevaría eso.

También según la Wikipedia, el volumen total de las aguas oceánicas de la Tierra asciende a 361.000.000 Km3, es decir, aproximadamente cinco veces el volumen del Océano Índico. Vamos, que ni siquiera es un orden de magnitud mayor, de modo que nos quedaríamos más o menos como estábamos. Incluso en el supuesto de que bin Laden pesase 37 Kg (o que los norteamericanos hubiesen arrojado al mar solo medio bin Laden) pasaríamos de 18 a 19D, una dilución a todas luces insuficiente.

Así que, poniéndonos serios, ¿qué necesitaríamos para conseguir una dilución de bin Laden a la "potencia" de 30C o más?

Según algunas estimaciones, la masa total del Universo ronda los 3,14x1054 Kg. De modo que para tener una dilución de bin Laden realmente eficaz contra el terrorismo (eficaz desde el punto de vista homeopático, ya me entienden) no tendríamos más que agarrar algo más de la mitad del Universo, transformar toda su masa en agua, y disolver en ella el cadáver. Unas cuantas sucusiones y asunto arreglado.

Así que ya ven: desde un punto de vista racional es bastante discutible que la muerte de bin Laden vaya a solucionar el problema del terrorismo islámico. Pero desde el punto de vista homeopático, nada de nada. Mala suerte.

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